Esta semana en los miércoles logísticos trataremos de concluir con un tema de especial relevancia que ya iniciamos la semana pasada, la influencia del SGA en la cadena de suministro…
Esperamos que os guste..
¿Qué funciones tiene un SGA?
Las funciones principales que se le requieren a un SGA son:
- Programación de tareas dentro del almacén, con asignación de recursos humanos y materiales, reglas de ejecución de procesos y gestión del movimiento del personal (tanto para la colocación como la extracción de cargas).
- Slotting o gestión de ubicaciones óptimas, siempre teniendo en cuenta los criterios que se establezcan.
- Trazabilidad en la gestión del almacén como: de todos los productos almacenados, como un registro de la utilización del personal y equipos por hora, mediación de la ocupación del almacén o eficiencia de las operaciones.
- Procesamiento de ordenes dependiendo la capacidad, necesidad del Servicio y/o requerimientos de recogida de productos, ya sea de manera convencional o agrupando pedidos según los criterios convenientes.
- Información on time, ya sea a través de aplicaciones web o sistemas de información donde los usuarios pueden acceder a información de inventario, ubicación de producto, estado de preparación de un pedido, entre otros aspectos de la gestión del almacén.
- Administración de la agenda de carga y descarga, para camiones y su programación, registro y control tanto de entradas como salidas.
- Generación de órdenes de trabajo que ofrecen valor añadido como la clasificación por precio, el empaque o asignación de inventarios, teniendo siempre en cuenta las reglas para gestionar su rotación.
A todo esto, hay que tener en cuenta que los proveedores de IT aparte de estas funcionalidades básicas pueden ofrecer la customización del software a medida de los requerimientos del cliente. La definición preliminar de los criterios funcionales por los que se tiene que regir el SGA son un elemento clave para que este ofrezca todo el rendimiento que puede llegar a alcanzar y se ajuste a las necesidades de cada caso.
El éxito de su implantación, es la definición y planificación previa, que nos aseguraran minimizar el impacto y reducir el tiempo de disponibilidad.
¿Cuál es su importancia?
Nuestra experiencia corrobora que, en ciertas empresas los almacenes significan un hasta un 25% de los costes totales, por lo tanto la buena gestión de este es un factor determinante en la rentabilidad del mismo.
La gestión óptima del almacén permite asegurar las entregas al compromiso adquirido con los clientes, con fiabilidad y optimizando el número de operaciones de manipulación y transporte.